La naranja es una excelente -y económica- fuente de vitamina C, antioxidante que refuerza el sistema inmunológico y previene los signos de la edad.  

Son ricas en fibra y ácido fólico. Contienen zeaxantina y luteína, dos carotenos que protegen la vista y previenen la degeneración macular asociada a la edad.

Las naranjas también contienen rutina, un flavonoides que ralentiza o previene la proliferación de tumores, y nobiletina, un compuesto antiinflamatorio. Todos estos fitonutrientes potencian las propiedades de la vitamina C.

Otras cualidades de la naranja:

• Su contenido de vitamina C promueve la formación de colágeno, previenen infecciones y reducen la intensidad y la duración de los resfriados.
• Son de bajo índice glucémico, por lo que están indicadas en caso de diabetes y dietas bajas en calorías.
• Tienen pectina, un tipo de fibra soluble que regula el colesterol.

Algunos tips:

• Elige naranjas pesadas (en comparación con su tamaño), esto es signo de frescura y jugosidad.

• Preferentemente refrigerarlas para que conserven la vitamina C.

• La piel de naranja es rica en nutrimentos, pero antes de ingerirla debes lavarla muy bien y dejarla secar.