¿Cómo perder peso sin morir en el intento?

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"Este año me pongo a dieta”. ¿Te suena? Uno de los propósitos de Año Nuevo con mayor demanda es perder peso, para lograrlo suele haber dos caminos, “el rápido", que además de regresarte el peso perdido (con unos kilitos extra de regalo), puede dañar tu salud. El otro camino quizá no es tan rápido, pero sí seguro. Consiste en eliminar de tu vocabulario la palabra "dieta" y comenzar a pensar en "estilo de vida".

3 consejos te ayudarán a perder peso sin morir en el intento

1.- Desayuna

Mucha gente por flojera, falta de tiempo o costumbre sale de casa con la panza vacía. Desayunar significa romper el ayuno y no necesariamente con platos laboriosos o abundantes. Una rápida y nutritiva opción son los -famosos- smoothies o licuados, su preparación no te quitará más de 5 minutos. Incluye un alimento de cada grupo del Plato del Bien Comer.

Grupo 1: Fruta de temporada. La madre naturaleza es tan sabia que ofrece verduras y frutas de acuerdo a los requerimientos nutrimentales de cada temporada. Aprovecha la gran diversidad con la que contamos los mexicanos.

Grupo 2: Cereales. Avena natural (mi favorito), amaranto o salvado de trigo natural. Puedes cambiar el cereal por semillas como chía, linaza, almendras o nueces.

Grupo 3: Leche de vaca. Aporta proteína de excelente calidad la cual te ayudará a evitar sentir hambre por un buen rato. Ojo. Si bien las lechadas vegetales son ricas, no aportan los mismos nutrimentos (proteína, calcio y vitamina D) que la leche de vaca, la cual se ha rodeado de mitos sin fundamento lo que hace que la gente deje de consumir este nutritivo alimento con muchos beneficios a la salud. Afortunadamente hoy, existen en el mercado distintos tipos de leche que se adaptan a tus necesidades y estilo de vida.

2.- Vuélvete selectivo

La calidad de los alimentos que incluyes en tu alimentación es primordial, no sólo para regresar a tus jeans favoritos, también para mantener un buen estado de salud. 

3.- Aumenta el consumo de proteína

Y con esto no me refiero a vivir de batidos de proteína y comer atún todo el día sino a mejorar la calidad de las misma. Las proteínas contribuyen al mantenimiento de la masa muscular y por tanto al aumento de la tasa metabólica. Es decir, mientras más músculo tengas, más calorías gastas.

Procura proteínas de alto valor biológico como huevo, pescado, pollo, mariscos, carne magra (filete, falda, cuete) y leche de vaca.

¡Aplícate! Aumenta la actividad física, así como el consumo de agua simple y recuerda que pequeños cambios, logran grandes diferencias.

Somos lo que comemos vs. lo que nos movemos.