Cómo evitar el desperdicio de alimentos

El desperdicio de alimentos tiene repercusiones para la seguridad alimentaria, la economía, el medio ambiente y el cambio climático. Las estimaciones sugieren que entre el 8 y 10% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero están asociadas con alimentos que no se consumen (1). Se estima que en México cada habitante desperdicia alrededor de 94 kilos de comida por año, es decir un aproximado del 34% de toda la producción anual de alimentos (2).

Un dato: 61% de los desperdicios alimentarios provienen de los hogares, el 26% de los servicios de alimentos y el 13% de la venta al por menor (2).

Principales causas del desperdicio de alimentos:

  1. Deterioro de alimentos

  2. Preparación excesiva

  3. Mala planificación de compras

Un dato: Los alimentos que más se desperdician en México son: leche, tortillas, jitomate, papa, carne, aguacate y pollo (3).

Consejos para evitar el desperdicio de alimentos

  1. Compra solo lo necesario. Planificar las comidas ayuda a evitar compras impulsivas y garantizar el uso de todos los ingredientes. Evita comprar “ofertas” de paquetes jumbo. 

  2. Almacenamiento adecuado. Almacenar frutas, verduras y otros productos perecederos correctamente puede extender su vida útil.

  3. Uso del congelador. Los alimentos -bien- congelados conservan sus cualidades nutricionales. Porcionar y congelar es un excelente método para evitar desperdicio.

  4. FIFO (First In, First Out). Organiza tu despensa y refrigerador colocando los productos más antiguos en la parte delantera para asegurarte de usarlos antes de que caduquen.

  5. Reutiliza. Sé creativo al reutilizar las sobras. Puedes transformar restos de una comida en otra para evitar tirar alimentos.

  6. Elige las feas. Las frutas y verduras con formas extrañas o magulladas a menudo se desechan porque no cumplen con “estándares cosméticos”. Considera que saben y nutren igual.

  7. Aprovecha al máximo los vegetales. Solemos tirar partes comestibles (como hojas y tallos) en la mayoría de los vegetales y estos, muchas veces suelen ser más nutritivos.

  8. Composta. Considera la posibilidad de compostar los restos de alimentos en lugar de tirarlos a la basura. La composta ayuda a reducir la cantidad de residuos alimentarios que van a los vertederos.

  9. Dona. Si tienes alimentos no perecederos que no usas, considera donarlos a organizaciones benéficas locales. Esto ayuda a reducir el desperdicio y beneficia a quienes lo necesitan.

  10. Crea conciencia. Comenta con tus familiares y comunidad lo importante que es evitar el desperdicio de alimentos tanto para tu economía como para el medio ambiente. Si evitamos producir alimentos que no comemos, podemos ahorrar agua, tierra y energía utilizada en su producción. 

Sabías que muchos platillos icónicos de la gastronomía mundial fueron creados para evitar el desperdicio o por falta de alimento.

ESTE TEXTO LO ESCRIBÍ PARA MENÚ DE EL UNIVERSAL